El Torino empató a uno en el partido en el que recibían al Parma, correspondiente a la 26ª jornada de la Serie A, que esta semana volvió a la acción tras el parón de tres meses. El goleador del equipo local, Nicolas N’Koulou, quiso dedicar su gol a «su hermano», George Floyd, con el ya habitual gesto hincando una rodilla en el suelo, pero nunca pensó en qué derivaría.
Seguramente, cuando N’Koulou decidió celebrar su tanto con una denuncia al racismo, nunca se imaginó que la imagen se haría viral sería arrodillado a su compañero de equipo -blanco-, Andrea Belotti. Pese a que la instantánea ha sido completamente casual, en redes sociales ha causado mucho revuelo.
Y es que la propia cuenta del club utilizó esta imagen para apoyar el movimiento #BlackLivesMatter, pero esto no ha sentado nada bien por la naturaleza de la foto. Muchos usuarios de Twitter criticaron el uso de una imagen así para «luchar» contra el racismo.
«Esta es la peor foto posible que podíais haber utilizado» o «la peor foto que he visto. Independientemente de lo que estuvieses intentando hacer, no ha funcionado», fueron algunos de los comentarios que se vieron a raíz de la publicación.