Sergio Ramos ha recordado la «histórica y mágica» consecución de la décima Liga de Campeones del club blanco en la final de Lisboa frente al Atlético de Madrid, «después de tantísimos años luchando», mientras que Luka Modric, el hombre que asistió al camero aquel día en el minuto 93, ha reconocido que estaba «tranquilo» y con la «convicción» de que iban a marcar.
«Con una sola palabra, yo diría que fue histórica. Histórica y mágica, porque el Madrid es un mundo mágico y somos muy afortunados de pertenecer a ello», señaló en una entrevista a los medios oficiales del club con motivo del sexto aniversario de aquella gesta.
«Lo primero que se me viene a la mente cuando pienso en Lisboa es el trofeo, la Champions, después de tantísimos años luchando para poder disfrutar primero de esa final y después de poder ganarla. Te acuerdas de toda tu familia y del sacrificio y esfuerzo que te ha costado durante muchos años. Es lo bonito del fútbol, la recompensa de poder levantar una Champions y añadirla a tu currículum», añadió.